En el día del libro y junto a la Editorial Café con Leche, estaré en el Kboom! 2016 en Barcelona vendiendo copias del libro en papel. Si vivís por Barcelona, será un placer recibir una visita (bueno, soy un poco vergonzoso pero trataré de superarlo 🙂 ).
Hoy comienza el año del mono de fuego, que además coincide con mi signo en el horoscópo chino. Según algunas lecturas rápidas (y poco documentadas), este año es bueno para lanzarse a la innovación pero con alguien pragmático cerca, porque el mono de fuego a veces no sabe lo que hace, igualito que yo 🙂
En cualquier caso, estéis donde estéis, espero que tengáis un buen principio de año lunar.
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A estas alturas, si estáis leyendo la novela, habréis oído hablar de este gran personaje: Liu Bang, también conocido como emperador Gaozu. Liu Bang es uno de estos hombres que no solo han dejado su huella en la historia, sino que vivieron una época y una vida llena de aventuras. De simple magistrado pasó a ser Emperador de la dinastía más larga de toda la historia de China. Podéis leer un pequeño resumen en wikipedia:
https://es.wikipedia.org/wiki/Liu_Bang
Sin embargo en occidente la vida de Liu Bang ha dejado poca huella. Al contrario que el Primer Emperador (Qin Shi Huang), la vida de Liu Bang no nos ha llegado en forma de cómics, películas y ciertamente casi ni libros de historia. Algo imperdonable considerando que si bien el Primer Emperador puso los cimientos del modelo imperial chino, lo cierto es que el edificio se habría derrumbado de no ser por la renovación de la dinastía Han. Además de sus aventuras, fue Liu Bang quien desarrolló ese nuevo imperio, ligeramente menos agresivo que el que le precedió que serviría de base para las dinastías posteriores.
Uno de los momentos más famosos de su lucha por la reunificación de China fue el banquete de la puerta de Hong (al que el Romance de los tres reinos referencia en el capítulo 21), una conspiración para acabar con Liu Bang en la que se inspira la película Hong Men Yan o Venganza Blanca.
Una de las mejores revistas de videojuegos de todos los tiempos. Y este mes hablan como no del Sangokushi 13, 30 aniversario (o Romance of the Three Kingdoms 13). Unas ganas de jugarlo…
¡Feliz año a todos! Seguro que no lo esperabáis a estas alturas, mejor, nunca es mal momento para recibir felicitaciones.
2015 ha sido un buen año gracias al apoyo que me habéis dado y este año espero que lo sea aún más porque este año tengo previsto acabar con la traducción.
Bueno, no os emocionéis demasiado, que eso no quiere decir que vaya a estar todo publicado para 2017, el proceso de revisión es exhaustivo, gracias a nuestra gran revisora, pero eso implica que acabar el libro lleva su tiempo. Es mejor así, cuantos menos errores haya, mejor se verán nuestros héroes.
Por otro lado este año quiero poner un poco de orden a este trabajo. Empecé con una página sin contenidos a la que no escribía nadie, sigo sin tener contenidos pero me escribe mucha gente. Así que he dejado sin darme cuenta cosas sin responder mientras no tenía claro si manejaba un blog o una página de facebook, así que creo que ha llegado el momento de tener un plan a la hora de trabajar en esto.
Y estos son mis propósitos de año nuevo, veremos a ver cuántos cumplo 🙂
Un abrazo a todos y gracias por vuestro apoyo.
Están en japonés, pero creo que la idea se entiende. Tienen buena pinta 🙂
Bien, tras estos capítulos hemos tenido plagas, rebeliones, batallas sin fin, sequías y hasta canibalismo. Llegamos a un punto en que uno se pregunta: ¿no es un poco exagerada esta novela?
Lo cierto es que si bien el Romance de los tres reinos tiene mucho de exageración y una parte concreta de inventarse hechos, la mayor parte de las batallas y acontecimientos fueron reales y las muertes que los acompañaban también. Recordaba los datos del máster que hice de estudios asiáticos, pero he encontrado un gráfico que lo muestra claramente:
Aquí podéis ver la población de China a lo largo de la historia. A finales de la dinastía Han se encontraba por encima de los 50 millones de personas. Pero para cuando termina el período de los tres reinos, se ha reducido a 20 millones. ¡Son más de 30 millones de diferencia! Tan duros eran estos tiempos que murieron generaciones enteras y nadie vino a sustituirlas. No solo eso, China no sería capaz de recuperar esa población hasta 8 siglos después. Ni siquiera las futuras invasiones de los mongoles de Gengis Kan en el siglo XIII tendrían semejante efecto…
Bueno, por fin puedo decir que he ido al salón del manga. ¡La sorpresa que me llevé cuando vi a uno de los participantes del concurso como Lu Bu!
Creo que él se sorprendió de que le reconociera pero esa es otra historia 🙂
Lo cierto es que ha sido divertido, aunque tenía la esperanza de encontrar traducido al español alguno de los innumerables manga basados en los Tres Reinos. Me he tenido que fastidiar. Bueno, estaba Ikkitousen, pero, claro, por muy monas que estén las niñas, no es lo mismo…
Y por fin antes de ayer estaba a la venta el quinto ebook con los capítulos del 20 al 24. Creo que la portada me ha quedado bonita, ya me contaréis 🙂
